Ricardo Fuentes e Hijos apuesta por la infraestructura y la innovación
La empresa cartagenera Ricardo Fuentes e Hijos iniciaba en 2003 una andadura que ha permitido a esta gran corporación multiplicar sus activos en lo relativo a beneficio, infraestructura e investigación. El atún rojo Ricardo Fuentes es sinónimo de calidad y se erige, dentro de su sector, como el producto mejor valorado para los públicos más exigentes.
La empresa decidió efectuar una importante apuesta por el futuro construyendo nuevas instalaciones en el Polígono de La Palma (Cartagena). No solo las instalaciones implicaron un cambio para mejor, sino que Ricardo Fuentes e Hijos decidió apostar por las más modernas técnicas de producción y conservación del pescado. Más de 6.000 metros cuadrados componen un complejo logístico que es capaz de alcanzar una capacidad productiva que supera las 8.000 toneladas al año.
Ricardo Fuentes se centra en garantizar las condiciones ambientales necesarias para ofrecer un producto de calidad, que cumpla los estándares de seguridad alimentaria y responda ante cualquier tipo de norma sanitaria. Una de las entidades más conocidas a nivel internacional en materia de certificación, como es el caso de Lloyd's Register Quality Assurance, se ha encargado en los últimos años de que el sistema de gestión de calidad del atun rojo Ricardo Fuentes cumpla con las distintas normativas en materia medioambiental, sanitaria e industrial e integrada bajo las más modernas tecnologías en automatización de procesos.
El departamento de calidad de Ricardo Fuentes e Hijos cuenta con un laboratorio y personal científico especializado en el que se realizan estrictos controles a las materia primas tanto analíticamente como atendiendo a sus cualidades organolépticas. A destacar son también los análisis que se hacen de la concentración de mercurio, plomo, cadmio y cobre.
Asimismo, se realiza un exhaustivo control sanitario del producto y de la repercusión medioambiental de los vertidos producidos a través de una depuradora. Por otra parte, la optimización en el diseño de la planta, adaptándola a las normativas sanitarias (tanto a nivel provincial como estatal) y dotándola de los más modernos medios técnicos, repercute en un gigantesco volumen de producción que mantiene la calidad del producto fabricado.
Con el paso de los años, Ricardo Fuentes e Hijos ha desarrollado diversas líneas de negocio, relacionadas en su mayor medida con la actividad tradicional de la empresa, que es la cría, cultivo y engorde del atún rojo Ricardo Fuentes, fundamentado en la optimización de técnicas para la puesta en cautividad y la eclosión de larvas. Esas investigaciones y la consecuente apuesta tecnológica han resultado un éxito a todos los niveles: tanto en la mejora de los procesos como en la calidad del producto, así como en el consecuente incremento de beneficios. La empresa cartagenera incrementó sus activos durante la última década en un 3.200%, y rondando además los 300 millones de euros en facturación en todas sus líneas de negocio, según las cifras facilitadas por la propia empresa.
En resumen, el atún rojo Ricardo Fuentes continúa situándose como referente mundial a nivel de infraestructura e innovación, así como en generación de empleo y riqueza, al mantener en su nómina de trabajadores a más de 900 personas.
La empresa decidió efectuar una importante apuesta por el futuro construyendo nuevas instalaciones en el Polígono de La Palma (Cartagena). No solo las instalaciones implicaron un cambio para mejor, sino que Ricardo Fuentes e Hijos decidió apostar por las más modernas técnicas de producción y conservación del pescado. Más de 6.000 metros cuadrados componen un complejo logístico que es capaz de alcanzar una capacidad productiva que supera las 8.000 toneladas al año.
Ricardo Fuentes se centra en garantizar las condiciones ambientales necesarias para ofrecer un producto de calidad, que cumpla los estándares de seguridad alimentaria y responda ante cualquier tipo de norma sanitaria. Una de las entidades más conocidas a nivel internacional en materia de certificación, como es el caso de Lloyd's Register Quality Assurance, se ha encargado en los últimos años de que el sistema de gestión de calidad del atun rojo Ricardo Fuentes cumpla con las distintas normativas en materia medioambiental, sanitaria e industrial e integrada bajo las más modernas tecnologías en automatización de procesos.
El departamento de calidad de Ricardo Fuentes e Hijos cuenta con un laboratorio y personal científico especializado en el que se realizan estrictos controles a las materia primas tanto analíticamente como atendiendo a sus cualidades organolépticas. A destacar son también los análisis que se hacen de la concentración de mercurio, plomo, cadmio y cobre.
Asimismo, se realiza un exhaustivo control sanitario del producto y de la repercusión medioambiental de los vertidos producidos a través de una depuradora. Por otra parte, la optimización en el diseño de la planta, adaptándola a las normativas sanitarias (tanto a nivel provincial como estatal) y dotándola de los más modernos medios técnicos, repercute en un gigantesco volumen de producción que mantiene la calidad del producto fabricado.
Con el paso de los años, Ricardo Fuentes e Hijos ha desarrollado diversas líneas de negocio, relacionadas en su mayor medida con la actividad tradicional de la empresa, que es la cría, cultivo y engorde del atún rojo Ricardo Fuentes, fundamentado en la optimización de técnicas para la puesta en cautividad y la eclosión de larvas. Esas investigaciones y la consecuente apuesta tecnológica han resultado un éxito a todos los niveles: tanto en la mejora de los procesos como en la calidad del producto, así como en el consecuente incremento de beneficios. La empresa cartagenera incrementó sus activos durante la última década en un 3.200%, y rondando además los 300 millones de euros en facturación en todas sus líneas de negocio, según las cifras facilitadas por la propia empresa.
En resumen, el atún rojo Ricardo Fuentes continúa situándose como referente mundial a nivel de infraestructura e innovación, así como en generación de empleo y riqueza, al mantener en su nómina de trabajadores a más de 900 personas.
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